Hay una "grave crisis en la Armada, un problema moral", dijo ayer el
presidente José Mujica en el Consejo de Ministros y en la tarde aceptó la
renuncia del comandante Alberto Caramés, sobre quien la Fiscalía decidirá si
pide su procesamiento.
El presidente Mujica anunció ayer lunes que aceptó el "pase a retiro voluntario" del comandante en jefe de la Armada, almirante Alberto Caramés, y el pase a disponibilidad de los contralmirantes Manuel Burgos y Federico Lebel.
El mandatario informó que el nuevo jefe de la fuerza de mar será Ricardo Giambruno y recordó las investigaciones penales en curso por irregularidades en manejo de fondos de la Armada, por la cual en 2010 fueron procesados varios oficiales navales.
Mujica dijo tener el "intimo convencimiento que la cadena se corta acá" y se pasa a "una franja de superación". Agregó que espera que estas decisiones enmarquen a la Armada "en un período de poder recobrar, entre su cuerpo de oficiales, la confianza indispensable en una institución que se tiene que mover con verticalidad".
Fuentes judiciales indicaron que en los próximos días, la fiscal del crimen organizado Mónica Ferrero decidirá si solicita el procesamiento de Caramés, quien está siendo indagado.
Según las fuentes, Caramés -quien declaró como indagado el 16 de diciembre de 2011- está muy comprometido por su presunta responsabilidad en dos compras irregulares que realizó en 2007 la Prefectura Nacional Naval mientras el actual comandante fue jefe de la Dirección de Material Naval (Dimat).
Las indagatorias judiciales determinaron el procesamiento de varios oficiales de la Armada, entre ellos un excomandante, Juan Fernández Maggio, y ayer declaró el también ex comandante Oscar Debali.
Además, la semana pasada, la fiscal Ferrero pidió el procesamiento con prisión del almirante retirado Hugo Viglietti, quien en 2010 estuvo fue encargado del comando de la fuerza de mar durante dos meses.
La representante del Ministerio Público también solicitó enjuiciar a otros seis oficiales y a 13 proveedores por maniobras en varias compras realizadas por la Armada.
Ayer, por el mismo expediente que a fines de 2011 declaró Caramés, compareció el excomandante naval Óscar Debali, quien renunció a su cargo cuando su sobrino, también marino, fue procesado por un hecho de corrupción.
Debali, quien es representado por el exfiscal y actual abogado penalista Enrique Möller, reconoció ayer que en 2007 dio una orden verbal para cambiar los productos a adquirir tras una licitación.
En los próximos días la jueza Gatti remitirá el expediente a la fiscal Ferrero, que evaluará la responsabilidad penal de Caramés, Debali y otros marinos que están siendo indagados.
DISPONIBILIDAD. En un comunicado oficial divulgado ayer, la Armada informó que Caramés pidió pasar a retiro tras cumplir su objetivo de "sanear a la institución".
Mujica, en una conferencia de prensa que brindó ayer, expresó que Caramés "ha dado este paso para dejarle las manos libres al Poder Ejecutivo para intentar procesar una suturación en materia de confianza de este cuerpo".
Sobre el pase a disponibilidad de Burgos y Lebel, Mujica dijo que las razones son "de confianza interna en el funcionamiento de la fuerza" y no dio más detalles, ya que eso le corresponde al ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro (ver aparte).
De todos modos, Mujica no descartó que estos oficiales puedan ocupar cargos en el futuro, pero dijo que eso estará sujeto a "la evolución dentro de las propias Fuerzas Armadas".
Tanto Burgos como Lebel están siendo investigados por las maniobras en la Armada, y de hecho ya declararon ante la magistrada Gatti.
TRANSICIÓN. Ayer, Mujica dijo que la de Caramés fue "una jefatura de transición en tiempos difíciles".
Acompañado por el subsecretario de Defensa, Jorge Menéndez, el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia, y el prosecretario Diego Cánepa, Mujica dijo que no le corresponde publicitar su opinión sobre las irregularidades en la Armada mientras está actuando la Justicia, aunque reconoció que "hubiera esperado tener el fallo antes, pero las cosas fueron así, demoraron".
Mujica agregó que las decisiones sobre Caramés, Burgos y Lebel "abren algunas interrogantes, quedan cargos vacíos que habrá que irlos cumpliendo". "Es una decisión enmarcada dentro del funcionamiento regular del Estado", señaló el mandatario.
Por otro lado, Mujica informó que las operaciones previstas entre efectivos de la Armada uruguaya y la estadounidense se mantienen "dentro de la rutina", aseguró.
Mujica: "En la Armada hay una grave crisis, un problema moral. La cadena se corta acá".
Fernández Huidobro hizo algunos comentarios a los senadores sobre la posibilidad de algunas decisiones de la Justicia con respecto a más oficiales navales, pero sin dar más detalles. Además, el ministro explicó la decisión de pasar a disponibilidad -en los hechos quedaron sin cargo ni mando de tropa- de los contralmirantes Manuel Burgos y Federico Lebel. Según el ministro, la idea es dejarle "las manos libres" al nuevo comandante Ricardo Giambruno, que asumirá hoy, y puede aplicar una reestructura en la cúpula naval.
Burgos y Lebel son oficiales con mayor antigüedad que Giambruno, un oficial de otra generación, por lo que se entendió pertinente tomar la medida.
El presidente Mujica anunció ayer lunes que aceptó el "pase a retiro voluntario" del comandante en jefe de la Armada, almirante Alberto Caramés, y el pase a disponibilidad de los contralmirantes Manuel Burgos y Federico Lebel.
El mandatario informó que el nuevo jefe de la fuerza de mar será Ricardo Giambruno y recordó las investigaciones penales en curso por irregularidades en manejo de fondos de la Armada, por la cual en 2010 fueron procesados varios oficiales navales.
Mujica dijo tener el "intimo convencimiento que la cadena se corta acá" y se pasa a "una franja de superación". Agregó que espera que estas decisiones enmarquen a la Armada "en un período de poder recobrar, entre su cuerpo de oficiales, la confianza indispensable en una institución que se tiene que mover con verticalidad".
Fuentes judiciales indicaron que en los próximos días, la fiscal del crimen organizado Mónica Ferrero decidirá si solicita el procesamiento de Caramés, quien está siendo indagado.
Según las fuentes, Caramés -quien declaró como indagado el 16 de diciembre de 2011- está muy comprometido por su presunta responsabilidad en dos compras irregulares que realizó en 2007 la Prefectura Nacional Naval mientras el actual comandante fue jefe de la Dirección de Material Naval (Dimat).
Las indagatorias judiciales determinaron el procesamiento de varios oficiales de la Armada, entre ellos un excomandante, Juan Fernández Maggio, y ayer declaró el también ex comandante Oscar Debali.
Además, la semana pasada, la fiscal Ferrero pidió el procesamiento con prisión del almirante retirado Hugo Viglietti, quien en 2010 estuvo fue encargado del comando de la fuerza de mar durante dos meses.
La representante del Ministerio Público también solicitó enjuiciar a otros seis oficiales y a 13 proveedores por maniobras en varias compras realizadas por la Armada.
Ayer, por el mismo expediente que a fines de 2011 declaró Caramés, compareció el excomandante naval Óscar Debali, quien renunció a su cargo cuando su sobrino, también marino, fue procesado por un hecho de corrupción.
Debali, quien es representado por el exfiscal y actual abogado penalista Enrique Möller, reconoció ayer que en 2007 dio una orden verbal para cambiar los productos a adquirir tras una licitación.
En los próximos días la jueza Gatti remitirá el expediente a la fiscal Ferrero, que evaluará la responsabilidad penal de Caramés, Debali y otros marinos que están siendo indagados.
DISPONIBILIDAD. En un comunicado oficial divulgado ayer, la Armada informó que Caramés pidió pasar a retiro tras cumplir su objetivo de "sanear a la institución".
Mujica, en una conferencia de prensa que brindó ayer, expresó que Caramés "ha dado este paso para dejarle las manos libres al Poder Ejecutivo para intentar procesar una suturación en materia de confianza de este cuerpo".
Sobre el pase a disponibilidad de Burgos y Lebel, Mujica dijo que las razones son "de confianza interna en el funcionamiento de la fuerza" y no dio más detalles, ya que eso le corresponde al ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro (ver aparte).
De todos modos, Mujica no descartó que estos oficiales puedan ocupar cargos en el futuro, pero dijo que eso estará sujeto a "la evolución dentro de las propias Fuerzas Armadas".
Tanto Burgos como Lebel están siendo investigados por las maniobras en la Armada, y de hecho ya declararon ante la magistrada Gatti.
TRANSICIÓN. Ayer, Mujica dijo que la de Caramés fue "una jefatura de transición en tiempos difíciles".
Acompañado por el subsecretario de Defensa, Jorge Menéndez, el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia, y el prosecretario Diego Cánepa, Mujica dijo que no le corresponde publicitar su opinión sobre las irregularidades en la Armada mientras está actuando la Justicia, aunque reconoció que "hubiera esperado tener el fallo antes, pero las cosas fueron así, demoraron".
Mujica agregó que las decisiones sobre Caramés, Burgos y Lebel "abren algunas interrogantes, quedan cargos vacíos que habrá que irlos cumpliendo". "Es una decisión enmarcada dentro del funcionamiento regular del Estado", señaló el mandatario.
Por otro lado, Mujica informó que las operaciones previstas entre efectivos de la Armada uruguaya y la estadounidense se mantienen "dentro de la rutina", aseguró.
Mujica: "En la Armada hay una grave crisis, un problema moral. La cadena se corta acá".
Huidobro explicó relevos al Senado
El ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, presentó ayer ante la comisión de Defensa del Senado una copia de la nota del almirante Alberto Caramés donde pide su pase a retiro. En la nota, el almirante explica que cumplió una etapa al frente de la Armada y que tras los acontecimientos de estos días en la Justicia, es conveniente su alejamiento del cargo. Caramés asumió como jefe de la Armada en agosto de 2010 tras el pase a retiro del almirante Oscar Debali, afectado porque la Justicia procesó a un sobrino suyo también oficial de marina por estar envuelto en la red de corrupción instalada en la fuerza.Fernández Huidobro hizo algunos comentarios a los senadores sobre la posibilidad de algunas decisiones de la Justicia con respecto a más oficiales navales, pero sin dar más detalles. Además, el ministro explicó la decisión de pasar a disponibilidad -en los hechos quedaron sin cargo ni mando de tropa- de los contralmirantes Manuel Burgos y Federico Lebel. Según el ministro, la idea es dejarle "las manos libres" al nuevo comandante Ricardo Giambruno, que asumirá hoy, y puede aplicar una reestructura en la cúpula naval.
Burgos y Lebel son oficiales con mayor antigüedad que Giambruno, un oficial de otra generación, por lo que se entendió pertinente tomar la medida.
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