En varios departamentos se agotó el stock de supergás entre el viernes y el sábado. Ayer se cumplió el tercer día de paro en las plantas de envasado aunque la medida se flexibilizó para atender el suministro industrial de supergás "a granel".
Aunque el envasado de supergás en garrafas para consumo doméstico continúa detenido desde el jueves, ayer se levantó parcialmente la medida para poder atender los pedidos de las industrias para las cuales es imprescindible el insumo.
El dirigente sindical José Vallejos dijo a El País que "la patronal no acompañó al sindicato" en una solicitud puntual para atender la demanda de Envidrio, empresa gestionada por ex empleados de Cristalerías del Uruguay.
Según Vallejos, la sugerencia de privilegiar a Envidrio llegó al sindicato de parte del subsecretario del Ministerio de Trabajo Néstor Loustanoff, y las empresas nucleadas en la Cámara Uruguaya de Gas Licuado respondieron que en ese caso debía cumplirse con todos los requerimientos desde el sector industrial.
"Para lograr cumplir se suspendió la medida para cumplir con todos los pedidos de envasado a granel", dijo.
El director nacional de Trabajo, Luis Romero, explicó a El País que no se buscó privilegiar a Envidrio por encima de otras industrias que también dependen del gas para trabajar. Dijo que la situación de la fábrica fue usada por Loustanoff como "un ejemplo".
Romero indicó que en el caso particular de Envidrio, "si se vitrifican los caños que trabajan el vidrio, eso obligaría a la empresa a parar de trabajar durante 120 días".
El director de Trabajo dijo que el sindicato "extraoficialmente parecería que ha levantado la medida parcialmente para la entrega a granel".
Otras fuentes indicaron que para las empresas del sector del gas licuado, atender sólo el pedido de Envidrio representaba "discriminar" al resto de las industrias y en este argumento se fundamentó la negativa para que solo la cristalera del Parque Tecnológico del Cerro fuera abastecida.
ESENCIALIDAD. Por otra parte, "ante las medidas totalmente desproporcionadas que ha adoptado el gremio en el conflicto que mantienen con las empresas encargadas de la distribución de gas licuado de petróleo, que están generando graves perjuicios a la población dejando al país sin supergás", el diputado nacionalista Álvaro Delgado solicitó ayer "la inmediata declaración de esencialidad del servicio por parte del Poder Ejecutivo".
Delgado (Unidad Nacional), miembro de la comisión de Industria de la Cámara de Diputados, dijo a El País que el lunes a la hora 14 la comisión recibirá a representantes de la Cámara Uruguaya de Gas Licuado para una reunión "informal".
También mañana se reanudarán las negociaciones entre las empresas, los trabajadores y el Ministerio de Trabajo.
Vallejos dijo ayer a El País que la propuesta de la patronal a los trabajadores "no conforma a nadie, ni en la salud, ni en lo salarial". Afirmó que el rechazo a esta propuesta será ratificado en asamblea el mismo lunes a las 6 de la mañana.
De acuerdo al diputado Delgado, "el gobierno tiene que ser muy firme". Dijo que "hace cuatro días que hay un desabastecimento importante" y señaló que "si están los ámbitos generados y el sindicato empieza una movilización con las medidas más drásticas, el gobierno tiene que ser más firme".
El representante de la oposición sostiene que "tanto los reclamos a nivel salarial como los de condiciones de trabajo se pueden canalizar a través de los ámbitos que ya existen".
Por eso considera que la medida de no envasar supergás es "injusta y desproporcionada" y pone a la población "de rehén".
De acuerdo a Delgado, "se está generando una situación energética crítica" que "afecta a las industrias, al comercio y a la población en general". Incluso, dijo, "hay industrias que están evaluando no trabajar algún día de la semana que viene" debido a la falta de combustible.
"La esencialidad del servicio de envasado y distribución" es necesaria, a juicio de Delgado "para normalizar la situación y seguir negociando las condiciones de trabajo y salariales".
LAS EMPRESAS. En un comunicado "a la opinión pública" publicado ayer en la prensa, la Cámara Uruguaya de Gas Licuado expresó su "frontal y enérgico rechazo a la adopción de medidas que toman a la población de rehén y provocan el desabastecimiento". Las empresas son Gas Uruguay S.A., Ducsa, Acodike, Riogas y Megal.
En el mismo comunicado sostienen que el sector "ha ofrecido a sus trabajadores un crecimiento real de las remuneraciones" que fue "considerado insuficiente por el sindicato que los agrupa, el que dispuso primero paros que afectaron a la producción y finalmente una paralización total de tareas que produjo el desabastecimiento total en el mercado".
Desabastecimiento en todo el país excepto en la frontera con Brasil
Aunque el supergás del lado brasileño cuesta un 25% más caro que en Uruguay, es un alivio para salvar la emergencia en las ciudades de frontera como Rivera. Como en el resto del país, el stock de garrafas se agotó en casi todos los puntos de venta y distribución o es muy escaso.
El desabastecimiento de supergás comenzó a sentirse con fuerza a partir del viernes en Paysandú, cuando los puestos de venta y especialmente las principales distribuidoras, agotaron su stock.
"El viernes la gente empezó a desesperarse porque ya no quedaba nada en ningún lado", dijo a El País, el encargado de uno de los más importantes puestos de venta y distribución de Ancap.
Explicó además que habían agotado las existencias de garrafas y tubos, por lo que "aunque algún puesto pueda tener algún resto, es difícil que quede algún comercio con garrafas o gas para recarga de garrafas chicas".
Similar situación se vivía en los centros de distribución de Riogas y Acodike, que ayer permanecieron cerrados. La contestadora telefónica automática de la primera de las empresas advertía a sus clientes que "como es de público conocimiento, debido a conflictos sindicales en la planta envasadora de Montevideo no podremos recepcionar su pedido hasta el lunes 14". "Finalizado el conflicto retomaremos la actividad con normalidad", agregaba la grabación.
En Montevideo, en algunos puestos del Centro sólo recargaban garrafas de tres kilos que los clientes llevaban. No había garrafas para distribuir.
En Colonia, la preocupación de los distribuidores era poder atender a los comercios y restaurantes durante el fin de semana.
En Maldonado, al menos Riogas no tenía stock para distribuir y contestaban por teléfono que podría haber novedades "entre el lunes y el martes".
Aunque el envasado de supergás en garrafas para consumo doméstico continúa detenido desde el jueves, ayer se levantó parcialmente la medida para poder atender los pedidos de las industrias para las cuales es imprescindible el insumo.
El dirigente sindical José Vallejos dijo a El País que "la patronal no acompañó al sindicato" en una solicitud puntual para atender la demanda de Envidrio, empresa gestionada por ex empleados de Cristalerías del Uruguay.
Según Vallejos, la sugerencia de privilegiar a Envidrio llegó al sindicato de parte del subsecretario del Ministerio de Trabajo Néstor Loustanoff, y las empresas nucleadas en la Cámara Uruguaya de Gas Licuado respondieron que en ese caso debía cumplirse con todos los requerimientos desde el sector industrial.
"Para lograr cumplir se suspendió la medida para cumplir con todos los pedidos de envasado a granel", dijo.
El director nacional de Trabajo, Luis Romero, explicó a El País que no se buscó privilegiar a Envidrio por encima de otras industrias que también dependen del gas para trabajar. Dijo que la situación de la fábrica fue usada por Loustanoff como "un ejemplo".
Romero indicó que en el caso particular de Envidrio, "si se vitrifican los caños que trabajan el vidrio, eso obligaría a la empresa a parar de trabajar durante 120 días".
El director de Trabajo dijo que el sindicato "extraoficialmente parecería que ha levantado la medida parcialmente para la entrega a granel".
Otras fuentes indicaron que para las empresas del sector del gas licuado, atender sólo el pedido de Envidrio representaba "discriminar" al resto de las industrias y en este argumento se fundamentó la negativa para que solo la cristalera del Parque Tecnológico del Cerro fuera abastecida.
ESENCIALIDAD. Por otra parte, "ante las medidas totalmente desproporcionadas que ha adoptado el gremio en el conflicto que mantienen con las empresas encargadas de la distribución de gas licuado de petróleo, que están generando graves perjuicios a la población dejando al país sin supergás", el diputado nacionalista Álvaro Delgado solicitó ayer "la inmediata declaración de esencialidad del servicio por parte del Poder Ejecutivo".
Delgado (Unidad Nacional), miembro de la comisión de Industria de la Cámara de Diputados, dijo a El País que el lunes a la hora 14 la comisión recibirá a representantes de la Cámara Uruguaya de Gas Licuado para una reunión "informal".
También mañana se reanudarán las negociaciones entre las empresas, los trabajadores y el Ministerio de Trabajo.
Vallejos dijo ayer a El País que la propuesta de la patronal a los trabajadores "no conforma a nadie, ni en la salud, ni en lo salarial". Afirmó que el rechazo a esta propuesta será ratificado en asamblea el mismo lunes a las 6 de la mañana.
De acuerdo al diputado Delgado, "el gobierno tiene que ser muy firme". Dijo que "hace cuatro días que hay un desabastecimento importante" y señaló que "si están los ámbitos generados y el sindicato empieza una movilización con las medidas más drásticas, el gobierno tiene que ser más firme".
El representante de la oposición sostiene que "tanto los reclamos a nivel salarial como los de condiciones de trabajo se pueden canalizar a través de los ámbitos que ya existen".
Por eso considera que la medida de no envasar supergás es "injusta y desproporcionada" y pone a la población "de rehén".
De acuerdo a Delgado, "se está generando una situación energética crítica" que "afecta a las industrias, al comercio y a la población en general". Incluso, dijo, "hay industrias que están evaluando no trabajar algún día de la semana que viene" debido a la falta de combustible.
"La esencialidad del servicio de envasado y distribución" es necesaria, a juicio de Delgado "para normalizar la situación y seguir negociando las condiciones de trabajo y salariales".
LAS EMPRESAS. En un comunicado "a la opinión pública" publicado ayer en la prensa, la Cámara Uruguaya de Gas Licuado expresó su "frontal y enérgico rechazo a la adopción de medidas que toman a la población de rehén y provocan el desabastecimiento". Las empresas son Gas Uruguay S.A., Ducsa, Acodike, Riogas y Megal.
En el mismo comunicado sostienen que el sector "ha ofrecido a sus trabajadores un crecimiento real de las remuneraciones" que fue "considerado insuficiente por el sindicato que los agrupa, el que dispuso primero paros que afectaron a la producción y finalmente una paralización total de tareas que produjo el desabastecimiento total en el mercado".
Desabastecimiento en todo el país excepto en la frontera con Brasil
Aunque el supergás del lado brasileño cuesta un 25% más caro que en Uruguay, es un alivio para salvar la emergencia en las ciudades de frontera como Rivera. Como en el resto del país, el stock de garrafas se agotó en casi todos los puntos de venta y distribución o es muy escaso.
El desabastecimiento de supergás comenzó a sentirse con fuerza a partir del viernes en Paysandú, cuando los puestos de venta y especialmente las principales distribuidoras, agotaron su stock.
"El viernes la gente empezó a desesperarse porque ya no quedaba nada en ningún lado", dijo a El País, el encargado de uno de los más importantes puestos de venta y distribución de Ancap.
Explicó además que habían agotado las existencias de garrafas y tubos, por lo que "aunque algún puesto pueda tener algún resto, es difícil que quede algún comercio con garrafas o gas para recarga de garrafas chicas".
Similar situación se vivía en los centros de distribución de Riogas y Acodike, que ayer permanecieron cerrados. La contestadora telefónica automática de la primera de las empresas advertía a sus clientes que "como es de público conocimiento, debido a conflictos sindicales en la planta envasadora de Montevideo no podremos recepcionar su pedido hasta el lunes 14". "Finalizado el conflicto retomaremos la actividad con normalidad", agregaba la grabación.
En Montevideo, en algunos puestos del Centro sólo recargaban garrafas de tres kilos que los clientes llevaban. No había garrafas para distribuir.
En Colonia, la preocupación de los distribuidores era poder atender a los comercios y restaurantes durante el fin de semana.
En Maldonado, al menos Riogas no tenía stock para distribuir y contestaban por teléfono que podría haber novedades "entre el lunes y el martes".
Es una verguenza en Salto hace cuatro días que estamos sin gas que esperan las autoridades para tomar medidas? No hay mas excusas hay que decretar la esencialidad del servicio pues sin bien se esta abasteciendo hospitales, escuelas y hogares que hay de las necesidades del resto de la población.